A medida que la inteligencia artificial se convierte rápidamente en algo común para los australianos, la ACCC advierte que la tecnología también plantea riesgos crecientes. En su descripción general de la industria de la IA, el organismo de control del consumidor dice que la IA se está utilizando para generar reseñas falsas, sitios web fantasma y estafas en línea cada vez más sofisticadas, lo que las hace más difíciles de detectar, y advierte que la rápida proliferación de productos y servicios impulsados por la IA podría potencialmente dañar a los consumidores y a la competencia si no se controla. Stephanie Youssef de SBS habló con la presidenta de la ACCC, Gina Cass-Gottlieb, sobre si la IA está creando una nueva generación de monopolios digitales y por qué requiere mayores poderes de vigilancia para seguir el ritmo de la industria en evolución.