“(Irán) expresa su disgusto por el hecho de que algunos políticos australianos se adhieran a las malvadas políticas del régimen genocida israelí y difundan mentiras contra Irán”, continuó el comunicado publicado en Telegram el viernes.
Esto siguió a los comentarios de Burke en agosto en los que desestimó las sugerencias de que Israel había presionado a Australia para que tomara medidas, diciendo que tales afirmaciones eran “una completa tontería”.
En las últimas semanas, la agencia de inteligencia israelí Mossad discutió públicamente la supuesta participación del IRGC en actividades antisemitas en el extranjero, incluida Australia, lo que provocó un mayor escrutinio de las operaciones regionales de Irán.