“Agradecí al secretario Rubio por sus condolencias, por su solidaridad con Australia y la comunidad judía australiana y por su mensaje de apoyo al pueblo estadounidense”, dijo Wong.
“No hay lugar para este antisemitismo, esta violencia y este terrorismo en nuestro país; estamos decididos a erradicarlo”.
Estados Unidos fue informado de la investigación y agradeció a Australia y a la comunidad judía australiana por su apoyo.
Según una lectura del llamado del lado estadounidense:
“Estados Unidos condena en los términos más enérgicos posibles el atroz ataque terrorista en Australia que tuvo como objetivo una celebración de Hanukkah organizada por el Chabad-Lubavitch de Bondi. Como dijo el Primer Ministro Albanese, fue 'un acto de maldad, de antisemitismo, de terrorismo'”.
“Nos solidarizamos con la comunidad judía y el pueblo australiano mientras oramos por las víctimas y sus familias. Agradecemos a los socorristas australianos y a los transeúntes por su heroica respuesta”.
“Mientras los judíos de todo el mundo encienden velas de Hanukkah esta noche, recuerdan el triunfo de la luz sobre la oscuridad y la larga historia de resiliencia judía frente a la opresión. Ninguna comunidad debería tener miedo de celebrar públicamente su fe y sus tradiciones debido a la amenaza de la violencia y el terror extremistas. No puede haber ningún compromiso con el antisemitismo: este flagelo debe ser enfrentado y derrotado”.
— Anna Henderson, corresponsal política en jefe de SBS News